Por: Juan Carlos López Castrillón
He leído en redes sociales lo que le está sucediendo a más de 1.600 personas que pagaron por Nequi una inscripción de cincuenta mil pesos ($50.000) cada uno, a la cuenta de una empresa particular llamada Endurance Colombia SAS, residenciada en Bogotá, para participar en la Media Maratón de Popayán 21k, la 10k y 5k.
Este certamen es o era organizado y promovido por la Alcaldía de Popayán y debió haberse realizado en principio el 25 de agosto de este año, pero apareció un búho y con su acostumbrada sabiduría le dijo a la comunidad “señores, no se pu’o”, entonces sacaron un comunicado y anunciaron que se correría el 1 de septiembre, pero de nuevo, un día antes volvió a aparecer el búho a decir “qué pena, no se pu’o”. Volvieron a reprogramarla para el pasado 15 de septiembre y por tercera vez trajeron al búho y todito sonrojado y cabizbajo dijo de nuevo “no se pu’o”. Conclusión, hasta el sol de hoy nada.
La cifra recaudada según cuentan los abogados que han empezado a actuar en este caso, no es poquita, son más de 80 millones de pesos, que por ahora no se sabe a donde fueron a parar. O mejor dicho sí, a la mencionada empresa bogotana; pero estos abogados esperan tener pronto una certeza total de lo que ha pasado en este caso.
La jornada deportiva tenía un lema muy bonito “prepárate para romper tus límites”, lo cual sin duda alguna se cumplió, se rompieron todos los límites. El problemita es que se rompieron sin correrse, ni se ha devuelto la plata, ni nada. Dicen que el organizador fue el único que salió corriendo.
En consecuencia, ¿Qué debe hacer el municipio? Pues dar la cara, guardar al búho y responder. Lo cual hasta ahora no ha sucedido. Se han limitado a expedir unos comunicados diciendo que la carrera se efectuará y que quien quiera su plata se le devolverá, pero no dicen cuándo ni cómo.
Las personas que se inscribieron confiaron de buena fe en las vallas, entrevistas de funcionarios y en todo el material publicitario, donde aparecía el nombre de la Secretaría del Deporte de Popayán y de la Alcaldía, y para ellos esa era suficiente garantía para depositar los 50.000 pesos. Algunos corredores vinieron desde otras ciudades y el día anterior se encontraron con una razón: no hay carrera y no se hacen devoluciones, de malas.
Ojalá puedan organizarla para antes de finalizar el año, o a principios del otro, a toda carrera y mejor si la hacen gratuita. Eso no es tan difícil, pero no resuelve dos preguntas: ¿Quién se quedó con la platica de quienes pagaron desde el mes de julio? Y ¿ Por qué y cómo escogieron a esa empresa particular para esta actividad?
Por ahora hay silencio en la casa blanca del parque de Caldas, la que algunos llaman ya “la casa estudio”. Hay tensión en este fin de año y siguen rondando las amenazas internas de salidas por convivencia. Ya van nueve eliminados en once meses.
Pero de verdad, hagan la carrera; y repito no permitan que un particular se quede con esa plática, hechos como este le pegan muy duro a la confianza en las autoridades locales.
Mientras tanto en medios y redes sociales muchas de esas más de 1.600 personas que se inscribieron y consignaron siguen opinando emberracadas y esperando. Estoy seguro que ellas estarían de acuerdo en decir SE ACEPTAN DEVOLUCIONES !!!! Vengan de donde vengan, así sean del búho.