A partir de mañana, Estados Unidos aplicará aranceles del 25% a las importaciones de Canadá y México, y del 10% a las de China. Simultáneamente, Richard Grenell, enviado especial del presidente Donald Trump, se encuentra en Venezuela para abordar temas migratorios y la liberación de ciudadanos estadounidenses detenidos.
Por: Alejandro Zúñiga Bolívar
La Casa Blanca ha anunciado que, a partir del sábado, Estados Unidos impondrá aranceles del 25% a las importaciones provenientes de Canadá y México, y del 10% a las de China. Esta medida busca presionar a estos países para que colaboren en la reducción de la inmigración no autorizada y el tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos. La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, afirmó: “A partir de mañana, esos aranceles estarán vigentes. Estas son promesas hechas y promesas cumplidas por el presidente“.
El presidente Donald Trump había señalado previamente que consideraba exenciones para las importaciones de petróleo de Canadá y México, pero hasta el momento no se han proporcionado detalles sobre posibles excepciones. Estados Unidos importa una cantidad significativa de petróleo de estos países, lo que podría influir en los precios de la energía y en la economía en general.
Estas acciones han generado reacciones en los países afectados. El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, advirtió sobre tiempos difíciles y mencionó posibles contramedidas, como imponer aranceles a productos estadounidenses. Por su parte, México ha expresado su preocupación por el impacto económico que estas medidas podrían tener en su economía y ha indicado que evaluará las acciones a tomar en respuesta.
En paralelo, Richard Grenell, enviado especial del presidente Trump para misiones especiales, ha viajado a Venezuela para reunirse con el régimen de Nicolás Maduro. El objetivo de esta visita es abordar dos temas principales: la aceptación por parte de Venezuela de migrantes venezolanos deportados desde Estados Unidos y la liberación de ciudadanos estadounidenses detenidos en el país sudamericano. Mauricio Claver-Carone, encargado de Latinoamérica en el Departamento de Estado, declaró: “Esta misión especial es muy concreta. Estados Unidos y el presidente Trump esperan que Nicolás Maduro reciba de vuelta a todos los criminales y miembros de pandillas venezolanos que han sido enviados a Estados Unidos, y que lo haga sin condiciones. Es un asunto innegociable“.