Moderno sistema de transporte aéreo conecta las veredas La Betulia y Ventiadero, reduciendo tiempos de transporte de una hora a 12 minutos. Este es el segundo cable entregado en el Cauca, el primero se ubica en el municipio de Inzá.

Redacción El Liberal
El sueño de unir las montañas con cables para aumentar el bienestar y la competitividad del sector rural ya es una realidad en el municipio de La Vega. En un especial evento comunitario se entregó oficialmente el segundo cable carga cafetero del Departamento, una obra que transforma el transporte en zonas de difícil acceso y mejora las condiciones de vida de las familias rurales.

Este moderno sistema aéreo conecta a las veredas La Betulia y Ventiadero, permitiendo que el traslado de productos agrícolas, insumos y materiales, que antes tomaba una hora por caminos empinados, ahora se realice en apenas 12 minutos.
La obra fue posible gracias al compromiso del Comité de Cafeteros del Cauca, Comité Municipal de Cafeteros de La Vega, que, atendiendo a la solicitud comunitaria, apostaron por una solución sostenible, económica y ambientalmente responsable. Esta infraestructura permite el traslado de 300 kilos por trayecto, reduce en un 98% los costos frente a una vía terrestre y prácticamente eliminan su impacto ambiental.
“El Cable carga fue construido con recursos del Fondo Nacional del Café, permite avanzar en el propósito de llevar bienestar a las familias cafeteras, esta vez con una obra que optimiza tiempos y recursos. Disminuir a 12 minutos los trayectos que se hacían en una hora confirma que la institución cumple a los caficultores e impacta de manera contundente al desarrollo regional”, indicó Roberto Castrillón Simmonds, Director Ejecutivo del Comité de Cafeteros del Cauca.

Durante el acto de entrega, la comunidad celebró este logro colectivo que evidencia cómo el trabajo gremial se traduce en bienestar real.
“Es una alegría para nuestro municipio tener este cable y darnos cuenta de que nuestro trabajo como caficultores permite que lleguen proyectos que mejoran las condiciones para que más jóvenes encuentren oportunidades en el campo y en el café, un cultivo que nos llena de esperanza y de vida. Gracias a la Federación Nacional de Cafeteros, que nos permite vivir estas alegrías y nos llena de orgullo”, expresó Miguel Ángel Muñoz, presidente del Comité de Cafeteros de La Vega.
De igual manera, una de las voces más significativas fue la de la juventud cafetera, que encuentra en este tipo de obras razones para seguir apostando por el campo. “Con este proyecto confirmamos que el café nos une, pues el cable no solo une a dos veredas cafeteras, sino que une comunidades, propósitos y proyectos comunitarios que nos permiten seguir sembrando café para cosechar la paz”, aseguró Marisol Buitrón, joven caficultora de La Vega.

Con este segundo cable carga en el departamento, la caficultura caucana avanza con infraestructura, compromiso y unidad. Porque el café no solo une montañas, también une voluntades, comunidades y sueños compartidos.