
Una explosión cerca de una institución educativa y la estación de policía en Morales, Cauca, dejó 17 personas heridas, incluyendo tres menores de edad y dos policías. Autoridades locales y nacionales condenan el ataque y exigen medidas de seguridad.
Por: Alejandro Zúñiga Bolívar
El municipio de Morales, ubicado en el departamento del Cauca, fue escenario de un atentado con explosivos que dejó 17 personas heridas, entre ellas tres menores de edad y dos agentes de la Policía Nacional. El incidente ocurrió en la tarde del lunes 24 de febrero de 2025, en las inmediaciones del parque principal, a escasos metros de la estación de policía y de la Institución Educativa Francisco Antonio Rada, justo cuando los estudiantes finalizaban su jornada académica.
Según informó el gobernador del Cauca, Octavio Guzmán, “un artefacto explosivo, posiblemente una motobomba, detonó a pocos metros de la estación de policía, dejando 17 personas heridas“. Entre los lesionados se encuentra “una niña de 7 años que tuvo que ser trasladada de urgencia por la gravedad de sus heridas, así como dos jóvenes con esquirlas en el rostro“. Además, dos policías resultaron heridos en el ataque.
El alcalde de Morales, Óscar Yamit Guachetá Arrubla, expresó su preocupación por la seguridad en el municipio y señaló que la explosión ocurrió en una zona concurrida, afectando directamente a los estudiantes que salían de clases. “Hasta que no tengamos el control territorial, no podemos dar una versión oficial“, afirmó Guachetá Arrubla, indicando que las autoridades están trabajando para esclarecer los hechos y determinar a los responsables de este acto que puso en riesgo a la población civil.
Un video compartido por el alcalde muestra a varios menores de edad corriendo del lugar del ataque, evidenciando el caos y el pánico que generó la explosión entre la comunidad. La onda expansiva también causó daños materiales significativos en viviendas y establecimientos comerciales cercanos, lo que llevó a los comerciantes a cerrar sus puertas por temor a nuevos ataques.
El municipio de Morales ha sido escenario de ataques similares en el pasado. En mayo de 2024, la estación de policía local fue destruida en otro atentado, y en agosto del mismo año, las disidencias de las FARC hostigaron la estación utilizando drones para lanzar explosivos, aunque en esa ocasión no se registraron víctimas ni heridos. La falta de reconstrucción de la infraestructura policial y la ausencia de medidas de seguridad efectivas han dejado a la población en una situación de vulnerabilidad constante.


Las reacciones de dirigentes políticos no se hicieron esperar. A través de la red social X, el exgobernador del Cauca y Representante a la Cámara, Óscar Campo, manifestó: “El presidente @petrogustavo no ha traído ni paz ni seguridad al #Cauca. Los errores de este gobierno han dejado a la población desprotegida y en medio de la fragmentación y el reacomodo violento de los grupos armados ilegales. No más discursos, el Cauca necesita acciones eficaces para garantizar la vida“.
Por su parte, el representante a la Cámara, Jorge Bastidas, expresó: “Condeno con indignación este hecho terrorista en Morales, esto es una guerra contra la población. Esto es un crimen contra el Derecho Internacional Humanitario. Mi solidaridad con toda la comunidad de Morales. Todas las entidades del estado se deben movilizarse ahora a proteger a las comunidades de este municipio“.
Asimismo, el también representante a la Cámara, César Cristian Gómez Castro, señaló: “Afectar a los ciudadanos y comerciantes no es la solución. Los ciudadanos NO tienen la potestad de tomar decisiones, es el Estado con quien se debe avanzar en el diálogo. Mi solidaridad con los habitantes de Morales que hoy son víctimas de un atentado que todos debemos rechazar“.
El comandante de la Policía en el Cauca, general Giovanni Torres, responsabilizó del ataque al Frente Jaime Martínez, una facción disidente de las FARC que opera en la región. Esta estructura está conformada por rebeldes que rechazaron el acuerdo de paz de 2016 y que, según las autoridades, han intensificado sus acciones en el departamento en los últimos meses.
La comunidad de Morales, compuesta por aproximadamente 40.000 habitantes, ha manifestado su temor ante la posibilidad de nuevos ataques y ha solicitado mayor presencia de las fuerzas de seguridad en la zona. Padres de familia y docentes de la Institución Educativa Francisco Antonio Rada expresaron su preocupación por la seguridad de los estudiantes y pidieron medidas inmediatas para garantizar la protección de la población civil.
El Gobierno Nacional, a través del Ministerio de Defensa, anunció el envío de refuerzos militares y policiales al municipio de Morales con el objetivo de restablecer el orden y brindar apoyo a las autoridades locales en la investigación de los hechos. Además, se comprometió a acelerar la implementación de programas de desarrollo y seguridad en el Cauca para contrarrestar la influencia de los grupos armados ilegales en la región.
Este atentado se suma a una serie de hechos violentos que han afectado al suroccidente colombiano en los últimos años, evidenciando la persistencia de dinámicas de conflicto y la necesidad de soluciones integrales que aborden las causas estructurales de la violencia en el país. La comunidad internacional y organizaciones defensoras de derechos humanos han expresado su preocupación por la situación en el Cauca y han instado al Estado colombiano a redoblar sus esfuerzos para proteger a la población civil y garantizar el respeto al Derecho Internacional Humanitario.