La administración de Jorge Octavio Guzmán Gutiérrez, gobernador del Cauca, enfrenta una serie de críticas que le han valido el penúltimo lugar en la reciente evaluación nacional de gestión.
Por: Alejandro Zúñiga Bolívar, El Liberal.
En el más reciente Panel de Opinión de Cifras y Conceptos, un estudio de percepción pública que mide, entre otras, el desempeño de los gobernadores del país, el Cauca se destacó, pero no de la manera que sus habitantes desearían. Con una calificación que lo ubica en el penúltimo lugar, el gobernador Jorge Octavio Guzmán Gutiérrez obtuvo una mala calificación en materia de gestión. En los últimos días, el gobernador del Cauca se ha venido enfrentando a una serie de críticas sobre su gestión, especialmente en temas clave como seguridad, infraestructura y educación.

La posición en el ranking
El bajo puntaje obtenido en la evaluación de Cifras y Conceptos no pasó desapercibido. Sin embargo, mientras algunos gobernadores logran mantener una evaluación medianamente positiva, la gestión de Guzmán Gutiérrez parece no convencer a los líderes de opinión. Los problemas y deficiencias acumuladas en su administración son cada vez más difíciles de ignorar, y la posición alcanzada en el panel de opinión resalta la urgencia de mejorar la eficiencia y eficacia en el gobierno departamental.
Seguridad en crisis: la violencia en aumento
Uno de los puntos que más preocupa a los habitantes del Cauca es la situación de orden público. En los últimos meses, el departamento ha sido escenario de numerosos actos de violencia, incluidos ataques perpetrados por disidencias de las FARC y otros grupos armados. La inseguridad se ha convertido en una constante, afectando no solo a las zonas rurales, sino también a los centros urbanos. Las autoridades locales han manifestado su impotencia ante la falta de apoyo efectivo del gobierno nacional, pero muchos ciudadanos creen que la administración departamental podría hacer más para proteger a la población.
Los bloqueos de vías, los retenes ilegales y los enfrentamientos entre grupos armados son solo algunos de los eventos que han marcado la vida en el Cauca. Aunque el gobernador ha reiterado en varias ocasiones su compromiso con la paz y la seguridad en la región, muchos sienten que las palabras no se han traducido en acciones concretas. La percepción es que la administración actual carece de un plan sólido para enfrentar la violencia y asegurar la estabilidad en el territorio, lo cual es un factor importante en su baja calificación en el estudio.
En todo caso, es claro que la situación de seguridad es un asunto del resorte del Gobierno Nacional quien, recientemente, ha iniciado una ambiciosa operación militar a la que el Gobernador ha venido reclamando que la intervención del Cauca no solo sea militar.
Educación: La estampilla Pro Universidad del Cauca y su ejecución
Otro de los aspectos críticos ha sido la gestión de los recursos para la Universidad del Cauca. Aunque recientemente se aprobó la ampliación de la Estampilla Pro Universidad del Cauca, que eleva el recaudo de 40.000 millones a 300.000 millones de pesos, la implementación efectiva de estos fondos aún está en proceso. La comunidad universitaria y algunos sectores del departamento han expresado su preocupación por la falta de claridad sobre cómo y cuándo se destinarán estos recursos a proyectos prioritarios.
La universidad es uno de los pilares educativos y culturales más importantes del Cauca, y cualquier atraso en la entrega de recursos afecta su desarrollo y su impacto en la región. Para muchos, la administración de Guzmán Gutiérrez no ha sido suficientemente proactiva en la gestión de estos fondos, dejando un vacío en la atención de las necesidades de esta institución. En un contexto en el que la educación se presenta como una alternativa para combatir la violencia y el desempleo, el retraso en la ejecución de los recursos es percibido como una gran falla.
Infraestructura: Promesas sin cumplir
En el ámbito de infraestructura, la situación es igualmente preocupante. Aunque el gobernador presentó su Plan de Desarrollo Departamental 2024-2027, titulado “La Fuerza del Pueblo”, que incluye una serie de proyectos de infraestructura, la ejecución de estos proyectos ha sido lenta y ha generado incertidumbre entre la ciudadanía. La falta de avances en obras de vialidad, transporte y desarrollo urbano afecta la economía y calidad de vida de los habitantes del Cauca.
El potencial económico del departamento es enorme, pero se ve obstaculizado por la falta de infraestructura adecuada. Los productores agrícolas, los comerciantes y los habitantes en general se enfrentan a constantes dificultades para movilizarse y distribuir sus productos. Los ciudadanos reclaman que, sin avances concretos en este sector, el crecimiento económico seguirá siendo limitado y el departamento no logrará superar las barreras que han frenado su desarrollo por años.
La evaluación que ubica al gobernador del Cauca en el penúltimo lugar en el panel de Cifras y Conceptos debe ser un llamado de atención urgente. Los problemas de seguridad, educación, infraestructura y transparencia no son nuevos, pero su persistencia sugiere que la administración actual no ha logrado implementar soluciones efectivas. Aunque Guzmán Gutiérrez ha expresado su compromiso con el desarrollo del Cauca, los resultados obtenidos hasta ahora reflejan la necesidad de cambios sustanciales en la forma en que se están abordando los desafíos del departamento.
El departamento del Cauca enfrenta una situación compleja que requiere liderazgo, visión y, sobre todo, acciones concretas que puedan revertir las percepciones negativas de la ciudadanía. La calificación obtenida en este panel no solo es un indicador de la insatisfacción de los habitantes, sino también una oportunidad para que la administración revise sus estrategias y se enfoque en construir un Cauca más seguro, próspero y transparente para todos.
La gestión del gobernador Jorge Octavio Guzmán Gutiérrez está bajo la lupa, y el penúltimo lugar en la evaluación nacional de su desempeño resalta la urgencia de implementar cambios. Los habitantes del Cauca esperan respuestas efectivas a sus necesidades en seguridad, educación, infraestructura y transparencia. Esta es una oportunidad para que la administración tome medidas concretas que permitan revertir esta percepción y construir un futuro mejor para el departamento.