Nicolás Maduro advirtió que su régimen está dispuesto a “defender los derechos del pueblo con nuestra propia vida si es necesario” en medio de tensiones políticas y sociales tras unas elecciones cuestionadas.
Por: Alejandro Zúñiga Bolívar
El régimen de Nicolás Maduro, señalado por organizaciones internacionales y gobiernos extranjeros por su falta de legitimidad tras las elecciones de julio de 2024, ha intensificado su discurso en defensa del control político en Venezuela. En declaraciones recientes, Maduro aseguró que su gobierno está dispuesto a “defender los derechos del pueblo con nuestra propia vida si es necesario”. La afirmación ocurre en medio de un clima de protestas y movilizaciones opositoras que desafían su continuidad en el poder.
Las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024 fueron ampliamente criticadas por presuntas irregularidades. El Consejo Nacional Electoral, controlado por el oficialismo, declaró ganador a Nicolás Maduro. Sin embargo, la oposición y organismos internacionales han denunciado falta de transparencia en el proceso. Edmundo González, principal líder opositor y señalado como el legítimo ganador por diversas fuentes, sostiene que obtuvo una amplia mayoría de votos y ha iniciado una gira internacional buscando respaldo para un cambio democrático.
En un evento transmitido por medios estatales, Maduro insistió en el papel de su régimen como protector del pueblo venezolano. “Nosotros debemos escuchar al pueblo, aprender de él, y estamos preparados para defender sus derechos, incluso con nuestra vida si es necesario”, expresó. Estas palabras han sido interpretadas como un intento de reforzar su narrativa de resistencia frente a lo que califica como un “bloqueo imperialista” liderado por Estados Unidos.
Además, Maduro destacó la aprobación reciente de la reforma de la Ley Orgánica de Justicia de Paz Comunal, que, según sus palabras, “acerca el sistema de justicia a las comunidades y empodera al pueblo”. Esta medida ha sido criticada por opositores, quienes la ven como un instrumento para consolidar el control del régimen sobre las bases sociales.
En contraste, la oposición ha intensificado sus llamados a manifestaciones. María Corina Machado, figura clave de la oposición, convocó a marchas para el 9 y 10 de enero, coincidiendo con la toma de posesión del nuevo período presidencial de Maduro. “Es hora de unirnos para rescatar la democracia en Venezuela. No más atropellos”, afirmó Machado. Edmundo González, quien continúa su gira internacional, reiteró su compromiso de regresar a Venezuela y liderar un gobierno legítimo.
La comunidad internacional se encuentra dividida en torno a la situación venezolana. Países como Estados Unidos, Argentina y Uruguay han manifestado su apoyo a González, reconociéndolo como presidente legítimo. Mientras tanto, aliados históricos de Maduro, como Cuba y Rusia, han reafirmado su respaldo al régimen.
En respuesta a las movilizaciones opositoras, el régimen de Maduro ha incrementado la presencia militar y policial en Caracas y otras ciudades clave. Se han instalado controles de seguridad en puntos estratégicos para evitar disturbios, mientras el chavismo organiza concentraciones en apoyo al mandatario.
