La Alcaldía de Popayán propone ceder nuevamente el Teatro Guillermo León Valencia a la Fundación homónima, generando debate sobre la gestión cultural y la transparencia en la selección de operadores.
Por: Alejandro Zúñiga Bolívar, El Liberal.
Hoy, en el Concejo Municipal de Popayán, se presentó el proyecto de acuerdo que autoriza al alcalde, Dr. Juan Carlos Muñoz Bravo, a entregar en comodato el Teatro Guillermo León Valencia a la Fundación que lleva su nombre. El concejal Paulo César Manrique Ortiz fue designado como ponente de esta iniciativa.
Desde 1999, el Concejo Municipal ha otorgado en comodato este emblemático inmueble a la Fundación Teatro Guillermo León Valencia, encargada de su administración y programación cultural. Este acuerdo ha permitido que el teatro mantenga una agenda activa, albergando eventos como el Festival de Música Religiosa y diversas presentaciones artísticas.
La propuesta actual busca renovar el comodato con la misma Fundación, argumentando la continuidad en la gestión y la experiencia acumulada en la administración del teatro. Sin embargo, el proyecto no especifica si se han considerado otras alternativas, como la operación directa por parte del municipio o la evaluación de otras entidades para garantizar transparencia y pluralidad en la selección del operador.
Importancia del Teatro Guillermo León Valencia
Inaugurado en 1927, el Teatro Guillermo León Valencia es un ícono del patrimonio cultural de Popayán. Su arquitectura neoclásica y su relevancia en la promoción de las artes escénicas lo convierten en un espacio vital para la cultura local.
En este contexto, es claro que la operación del Teatro es fundamental para garantizar el derecho a la cultura en Popayán. Sin embargo, la entrega de un inmueble tan importante como este, requeriría un esfuerzo adicional que no solo se resguarde en la idea de que, desde hace 24 años, se ha entregado en comodato.
Las normas y las realidades del Municipio y la Fundación no son las mismas. En ese sentido, merecería una reflexión profunda que no impida que, por vicios de forma, una iniciativa tan importante como estas pueda terminar objetada.
