RODRIGO SOLARTE – rodrigosolarte27@gmail.com
El poder concentrado en tan pocas personas por tan largo tiempo, ha llevado a la humanidad a las polarizaciones y estructurales maltratos con el común denominador de las corrupciones y violencias.
Penetrado el poder económico como símbolo cultural del valor social, gestó el egoísmo y la ausencia de solidaridad entre los seres humanos y las otras manifestaciones de vida en la naturaleza planetaria conocida por las ciencias, aplicadas estas, en las técnicas que han llegado hasta la Inteligencia artificial ( IA ) que tal poder está desarrollando.
Lo más valioso que tenemos como personas y colectivos es la estructura mental, concebida en esta era digital y cuántica positivista, como el ´´disco duro´´ donde habita el sistema nervioso central y periférico con cualidades y capacidades tan asombrosas y desconocidas aún, como el Universo o Cosmos con los millones de estrellas, siendo el sol, la que según la limitada ciencia aeroespacial, nos ha correspondido como planeta tierra.
Desde estas disquisiciones primarias pretendo plantear la contraria apreciación humana del BUEN TRATO INTEGRAL como paradigma actitudinal para retomar con mayor decisión la HUMANIZACIÓN que en este proceso histórico hemos perdido por tal poder impregnador de conciencias en esta era del Capitalismo y Neoliberalismo que llegará a su fin, si es que A CONCIENCIA deseamos sobrevivir a la Sindemia que ha ocasionado.
La negación de lo estructural que es como el todo concebido por diferentes disciplinas del conocimiento, lleva a considerar las partes especializadas tanto en lo macro como en lo micro, necesaria y muy valiosa, pero incompleta por desconocer la relación con los demás conocimientos y el contexto integral donde se gesta o produce, para luego aplicarse al mejoramiento de las condiciones de vida de todas y todos, no solo de la élite que la financia y aplica.
La Política seria, rigurosa y actualizada con los conocimientos interdisciplinares y transdisciplinares con la Biodiversidad, como ejemplo, que sin egoísmos se compartan como ESPECIE HUMANA SOLIDARIA, son como LA JUSTICIA Y LA PAZ, un sueño y esperanza permanente, inspirador de espiritualidades excepcionales pero existentes al interior de la enorme diversidad de la ESPECIE HUMANA que ha existido y existe.
Hemos aprendido a maltratarnos desconociendo al otro o diferente desde niños y niñas. De nuestros padres aprendemos inicialmente por imitación, de lo bueno o lo malo que vivan o hagan. De esa socialización primaria del proceso educativo con familia u otros cuidadores, continuamos con las maestras y maestros del kínder y otros niveles hasta los cinco o seis primeros años de vida, dentro y fuera de la casa o habitación que se tenga.
Reactivando lo humano que todas y todos tenemos como jóvenes y adultos, a pesar de lo vivido o por la impresionante violencia y corrupción a la que se ha llegado en El Cauca, Colombia y tantas partes de la humanidad en sus regiones, el instinto de conservación y afecto que todo lo pequeño desencadena, ha contado con la dedicación de quienes han resistido tales tentaciones maltratadoras que han llegado hasta los GENOCIDIOS y CORRUPCIONES que a diario vemos a través de los medios de comunicación, en algunos de ellos como una noticia más en medio de las comerciales y recreativas.
Apreciamos con sinceridad y compromiso para que tales esfuerzos continúen, la dedicación del ACTUAL GOBIERNO PARA TANTOS CAMBIOS que consideramos indispensables, centrados en LA HUMANIZACIÓN y lucha decidida contra la corrupción y todas las manifestaciones y hechos de violencia y muerte que persisten.
Conscientes de lo vivido en guerras, maltratos, injusticias y muertes que tanto miedo han ocasionado en vidas y territorios, continuaremos apoyando y estimulando el compromiso sincero de las y los adultos de hoy, jóvenes, mujeres y hombres, para que el BUEN TRATO INTEGRAL haga parte de sus planes y proyectos permanentes de VIDA CIVILIZADA.