Por Diego Fernando Sánchez Vivas
Una serie de expectativas y retos importantes nos esperan en el transcurso del año 2025 que comienza.
En el tema de paz y orden público, se plantean importantes interrogantes como la materialización de acciones reales y concretas en el marco de las negociaciones dentro de la llamada “Paz total”, que conduzca al cese de la violencia y el secuestro por parte de las disidencias de las Farc, el Eln y los demás grupos que se encuentran adelantando el proceso. Igualmente el Gobierno debe adoptar medidas efectivas e inmediatas tendientes a evitar los asesinatos de líderes sociales.
En materia legislativa se espera la culminación del trámite en el Congreso de importantes iniciativas legislativas. El tema de la salud tiene una connotación muy especial por cuanto se evidencia una crisis estructural que amenaza con colapsar todo el sistema en detrimento de los usuarios que deben afrontar con muchas limitaciones el otorgamiento de medicamentos, citas médicas con especialistas, tratamientos de alta complejidad y enfermedades graves que requieren procedimientos de alto costo. Deberán adelantar su trámite igualmente la reforma laboral, política y la reforma a la justicia entre otras, algunas de cuyas iniciativas han causado diferencias de criterio en el ámbito académico.
En materia económica debemos evidenciar en el año que comienza los impactos del poco crecimiento económico, el precio del dólar que se mantiene estable pese a los augurios pesimistas de algunos economistas, también asimilar el costo de la canasta familiar con las alzas del inicio de año, al igual que el tema del aumento del precio de la gasolina esto después de un importante aumento en el valor del salario mínimo de los colombianos.
En materia política, el año que comienza marca el inicio de los diferentes movimientos y partidos en torno a las elecciones parlamentarias y presidenciales para afrontar los comicios del 2026, se definirán y decantarán las aspiraciones para presidente y congreso y se esperan en este año cambios ministeriales y en las administraciones departamentales y municipales.
Esperemos entonces que estos temas anunciados nos permitan poder pensar en un país mejor, y sobre todo en una nación en paz y con unas condiciones sociales dignas para toda la población.