Padre Jesús Fernando Vega Muñoz. Pbro.
En el pasaje del Evangelio según san Lucas, Jesús envía a setenta y dos discípulos de dos en dos a todos los pueblos y lugares adonde pensaba ir él. Les da instrucciones específicas sobre cómo deben actuar y qué deben decir.
Jesús destaca la importancia de la misión evangelizadora y la necesidad de más obreros para llevar a cabo esta tarea. La mies es abundante, pero los obreros son pocos, por lo que es fundamental que los discípulos rueguen al dueño de la mies para que envíe más obreros.
Jesús les da a los discípulos instrucciones específicas sobre cómo deben actuar:
– No llevar bolsa, ni alforja, ni sandalias.
– No saludar a nadie por el camino.
– Decir “Paz a esta casa” cuando entren en una casa.
– Quedarse en la misma casa y comer y beber de lo que tengan.
– Curar a los enfermos y anunciar el reino de Dios.
Jesús destaca la importancia de la hospitalidad y la recepción. Si los discípulos son recibidos en una casa o ciudad, deben quedarse y anunciar el reino de Dios. Si no son recibidos, deben sacudir el polvo de sus pies y anunciar que el reino de Dios ha llegado.
Jesús les da a los discípulos el poder de pisotear serpientes y escorpiones y todo poder del enemigo. Sin embargo, les advierte que no deben estar alegres porque se les someten los espíritus, sino porque sus nombres están inscritos en el cielo.
En resumen, este pasaje del Evangelio según san Lucas destaca la importancia de la misión evangelizadora y la necesidad de más obreros para llevar a cabo esta tarea. También destaca la importancia de la hospitalidad y la recepción, y el poder que tienen los discípulos para anunciar el reino de Dios y realizar milagros en su nombre.