Durante marzo, se reportaron 133 hechos delictivos que afectaron a la comunidad ganadera, incluidos casos de carneo, extorsión y secuestro. El departamento del César fue el más afectado. Mientras tanto, la estrategia de Frentes Solidarios de Seguridad y Paz avanza con operativos, tecnología y coordinación interinstitucional, destacando resultados en Cauca, Antioquia y Magdalena.
Durante el mes de marzo de 2025, la seguridad del gremio ganadero colombiano se vio afectada por diversos hechos de violencia e inseguridad. Según lo reportado en el boletín de seguridad ganadera, se presentaron 133 casos de delitos, de los cuales 34 afectaron directamente a miembros de la comunidad ganadera, y los 99 restantes a la comunidad en general.
Uno de los fenómenos más frecuentes fue el carneo, con 14 casos reportados en igual número de municipios de los departamentos de Cundinamarca, La Guajira, Nariño, Tolima, Huila, Meta, Sucre, Atlántico, Antioquia y César. Este último departamento fue el más afectado del país. En total, se vieron involucradas 267 reses, de las cuales solo 70 fueron recuperadas. Se reportó también el homicidio de un ganadero y su hija, lo que ha encendido las alarmas sobre el deterioro de las condiciones de seguridad en zonas rurales.
Los informes del GAULA de la Policía Nacional señalan que en lo que va del año se han presentado 13 casos de extorsión, con exigencias superiores a los 100 millones de pesos, y 4 casos de secuestro con fines extorsivos, donde las exigencias económicas superarían los 17 mil millones de pesos.
Un aspecto preocupante del reporte de marzo es que de los 34 casos que afectaron directamente a ganaderos, 20 no fueron denunciados. Esta situación refleja una desconfianza persistente en la capacidad de respuesta del Estado o un temor generalizado a represalias por parte de los grupos armados o delincuenciales que operan en las regiones.
Sin embargo, también se destacan avances importantes derivados de la implementación de la estrategia nacional de Frentes Solidarios de Seguridad y Paz (FSSP), impulsada por FEDEGÁN, las autoridades policiales y militares, y organizaciones regionales de ganaderos. En el departamento del Cauca, por ejemplo, se logró desarticular una red dedicada al abigeato en zona rural de Popayán. La operación fue posible gracias a labores conjuntas de inteligencia entre la Fiscalía, la Policía y los propios ganaderos, y culminó con la emisión de órdenes de captura contra tres personas.
Asimismo, en el municipio de Codazzi, en el departamento del César, se logró la recuperación de la hacienda Las Camelias, luego de una invasión. Este hecho fue posible gracias a la acción conjunta entre las brigadas solidarias y las instituciones del Estado.
Durante el mes, la estrategia FSSP continuó su implementación con reuniones de coordinación entre Carabineros, GAULA y Fuerzas Militares para fortalecer herramientas como la aplicación del “Botón de alerta” y las redes de comunicación directa entre ganaderos y autoridades. En el municipio de La Pintada (Antioquia) se realizó una reunión con representantes de la Asociación de Ganaderos (ASOGANAR) y de FEDEGÁN, enfocada en la organización de los productores para enfrentar los riesgos de seguridad.
En total, se realizaron 23 reuniones virtuales con 95 participantes de 22 frentes solidarios. A través de los 136 grupos de WhatsApp de la red, se difundieron ocho piezas gráficas sobre medidas de autoprotección y líneas de emergencia. Entre las preocupaciones más sentidas por los ganaderos están el aumento de los casos de carneo, nuevas modalidades de invasión de tierras y el incremento de secuestros.
En Santa Marta, las autoridades locales y los altos mandos de la Dirección de Carabineros y la Policía Metropolitana participaron en encuentros con representantes ganaderos para dar a conocer los logros del FSSP, que incluyen la dotación de 110 radios para la red de comunicaciones, el uso del botón de alerta y la implementación de medidas tecnológicas para mejorar la respuesta ante emergencias.
Entre las recomendaciones emitidas por las autoridades a los ganaderos están: mantener reserva sobre su información personal y rutinas; variar rutas y horarios; fortalecer la seguridad en lugares de residencia y trabajo; informar sus movimientos a personas de confianza; evitar el manejo de grandes sumas de dinero en efectivo; establecer canales de comunicación con la Policía y capacitar al personal en medidas de autoprotección.
Las estadísticas muestran que, a pesar de los esfuerzos, el sector sigue siendo blanco de estructuras delictivas. La combinación entre medidas de autoprotección, fortalecimiento de redes de apoyo entre ganaderos, y la acción coordinada con las autoridades, es clave para revertir la tendencia de inseguridad que afecta a buena parte del país rural.
El panorama de marzo confirma que los retos para la seguridad del sector ganadero siguen siendo grandes, pero también demuestra que cuando hay coordinación entre la institucionalidad y los gremios, es posible obtener resultados concretos. El desafío de fondo sigue siendo garantizar que estas estrategias lleguen de forma efectiva a todos los rincones del país.
