El presidente Gustavo Petro no asistirá a la toma de posesión de Nicolás Maduro el 10 de enero; en su lugar, el embajador colombiano en Venezuela, Milton Rengifo, representará al país, manteniendo las relaciones diplomáticas con el vecino país.
Por: Alejandro Zúñiga Bolívar
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha decidido no asistir a la ceremonia de toma de posesión de Nicolás Maduro, programada para el próximo 10 de enero en Caracas. En su lugar, el embajador de Colombia en Venezuela, Milton Rengifo, será quien represente al país en dicho evento. Esta decisión se enmarca en la política del gobierno colombiano de mantener relaciones diplomáticas con Venezuela, a pesar de las controversias en torno a las elecciones presidenciales venezolanas del 28 de julio de 2024.
El presidente Petro anunció su decisión de no asistir a la ceremonia de posesión de Maduro a través de sus redes sociales, expresando su preocupación por la reciente ola de represión en Venezuela, que incluye detenciones de figuras opositoras y defensores de derechos humanos. Petro afirmó: “No puedo reconocer elecciones que no considero libres; sin embargo, mantendremos las relaciones diplomáticas con Venezuela“.
A pesar de la ausencia del presidente Petro, Colombia estará representada en la ceremonia por su embajador en Venezuela, Milton Rengifo. El vicecanciller colombiano, Jorge Rojas, confirmó esta decisión, indicando que es una muestra de la intención del gobierno colombiano de mantener canales diplomáticos abiertos con el país vecino.
Las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024 en Venezuela han sido objeto de controversia y denuncias de irregularidades. Nicolás Maduro se declaró vencedor, pero la oposición, encabezada por Edmundo González, ha presentado pruebas que, según ellos, demuestran su triunfo en los comicios. La comunidad internacional se encuentra dividida, con algunos países reconociendo a Maduro y otros expresando su apoyo a González.
Desde su llegada al poder, el presidente Gustavo Petro ha buscado restablecer y fortalecer las relaciones diplomáticas con Venezuela, que habían sido prácticamente inexistentes en años anteriores. A pesar de las diferencias políticas y las controversias en torno al gobierno de Maduro, Petro ha enfatizado la importancia de mantener un diálogo abierto y constructivo con el país vecino, considerando los lazos históricos y la extensa frontera compartida.
La decisión de enviar al embajador Rengifo en representación de Colombia ha generado diversas opiniones en el ámbito político colombiano. Algunos sectores consideran que esta acción es coherente con la política de no intervención y de mantenimiento de relaciones diplomáticas, mientras que otros critican cualquier forma de reconocimiento al gobierno de Maduro, al que califican de ilegítimo.
