Human Rights Watch reporta que más de 56.500 personas fueron desplazadas en el Catatumbo entre enero y febrero de 2025 debido a enfrentamientos entre el ELN y el Frente 33 de las disidencias de las FARC.
Por: Alejandro Zúñiga Bolívar.
La región del Catatumbo, ubicada en el departamento de Norte de Santander, Colombia, ha sido escenario de una crisis humanitaria sin precedentes en los primeros meses de 2025. Según un informe de Human Rights Watch (HRW), más de 56.500 personas fueron desplazadas forzosamente entre enero y febrero debido a los enfrentamientos entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Frente 33 de las disidencias de las FARC. citeturn0search0
Contexto del conflicto
El Catatumbo es una región estratégica en la frontera con Venezuela, caracterizada por su geografía montañosa y selvática, lo que la convierte en un corredor ideal para actividades ilícitas como el narcotráfico y el contrabando. Históricamente, diversos grupos armados han disputado el control de esta zona debido a su importancia económica y geopolítica. citeturn0search2
Desde la desmovilización de las FARC en 2016, el ELN ha buscado expandir su influencia en el Catatumbo. Sin embargo, la aparición de disidencias de las FARC, como el Frente 33, ha generado una competencia violenta por el control territorial y de las economías ilegales. Esta confrontación se intensificó a mediados de enero de 2025, cuando el ELN lanzó una ofensiva para expulsar al Frente 33 de la región. citeturn0search10
Impacto en la población civil
Los enfrentamientos han tenido consecuencias devastadoras para la población civil. Además del desplazamiento masivo, se han reportado asesinatos selectivos, secuestros y desapariciones forzadas. HRW documentó casos en los que el ELN ejecutó a campesinos acusados de colaborar con el Frente 33, mientras que este último ha sido señalado por reclutar forzosamente a menores y establecer “campamentos de resocialización” donde obligan a civiles a trabajos forzados. citeturn0search0
La situación ha llevado a que comunidades enteras abandonen sus hogares, buscando refugio en municipios vecinos o incluso cruzando la frontera hacia Venezuela. Las condiciones de los desplazados son precarias, enfrentando falta de alimentos, atención médica y alojamiento adecuado. La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) ha expresado su preocupación por la magnitud de la crisis y la limitada capacidad de respuesta humanitaria. citeturn0news25
Reacciones de actores públicos y privados
Ante la gravedad de la situación, diversas organizaciones y entidades han alzado su voz:
- Defensoría del Pueblo: Ha emitido alertas tempranas sobre el riesgo que enfrentan las comunidades del Catatumbo y ha instado al gobierno a reforzar la presencia institucional en la zona.
- Naciones Unidas: A través de su representante en Colombia, han condenado las violaciones de derechos humanos y han llamado a los grupos armados a respetar el Derecho Internacional Humanitario.
- Organizaciones locales: Asociaciones campesinas y de derechos humanos han organizado movilizaciones para visibilizar la crisis y exigir soluciones integrales que aborden las causas estructurales del conflicto.
Respuesta del gobierno
El presidente Gustavo Petro ha declarado el estado de emergencia económica y social en la región del Catatumbo, con el objetivo de movilizar recursos para atender a la población afectada y restablecer el orden público. Además, se ha incrementado la presencia militar en la zona para contrarrestar a los grupos armados y garantizar la seguridad de los habitantes. citeturn0news23
No obstante, esta estrategia ha sido objeto de debate. Algunos analistas y líderes sociales argumentan que la militarización no es suficiente y que se requieren políticas integrales que incluyan inversión social, desarrollo económico y fortalecimiento de la institucionalidad en el territorio. Héctor Riveros, analista político, señaló: “La solución no puede ser únicamente militar; es necesario abordar las causas profundas que generan la violencia en el Catatumbo”.
Perspectivas a futuro
La crisis en el Catatumbo refleja las complejidades del conflicto armado en Colombia y los desafíos que enfrenta el proceso de paz. La presencia de múltiples actores armados, las economías ilegales y la débil presencia estatal han perpetuado un ciclo de violencia que afecta principalmente a la población civil.
Es fundamental que el gobierno, en colaboración con la comunidad internacional y las organizaciones locales, implemente estrategias integrales que aborden tanto la seguridad como el desarrollo socioeconómico de la región. Solo así será posible construir una paz sostenible y garantizar el bienestar de las comunidades del Catatumbo.
Mientras tanto, miles de familias continúan desplazadas, esperando soluciones que les permitan regresar a sus hogares y reconstruir sus vidas en condiciones de dignidad y seguridad.
navlistCrisis humanitaria en el Catatumbo: desplazamientos masivos y violenciaturn0news17,turn0news19,turn0news25
