La discusión de la reforma a la salud en la plenaria de la Cámara fue aplazada debido a recusaciones presentadas contra las bancadas de los partidos Alianza Verde y Liberal, lo que impidió resolver las recusaciones por falta de quórum en la Comisión de Ética.
Por: Alejandro Zúñiga Bolívar
El 13 de febrero de 2025, la plenaria de la Cámara de Representantes suspendió el debate sobre la reforma a la salud tras la presentación de recusaciones contra las bancadas de los partidos Alianza Verde y Liberal. Estas acciones generaron una interrupción en la discusión y llevaron a la suspensión de la sesión hasta que la Comisión de Ética se pronuncie al respecto.
La recusación presentada contra la bancada del Partido Alianza Verde argumenta un posible conflicto de interés debido al reciente nombramiento de Antonio Sanguino, miembro destacado de dicha colectividad, como ministro de Trabajo en el gobierno del presidente Gustavo Petro. Según el documento, este nombramiento podría influir en la imparcialidad de los representantes del partido al momento de debatir y votar la reforma a la salud.
De manera similar, se presentó una recusación contra la bancada del Partido Liberal, señalando que algunos de sus miembros habrían recibido financiamiento de campañas por parte de empresas del sector salud, lo que podría constituir un conflicto de interés en la discusión de la reforma. Ante esta situación, la mayoría de los representantes liberales optaron por retirarse de la sesión, lo que contribuyó a la falta de quórum.
El presidente de la Cámara, Jaime Raúl Salamanca, explicó que, debido a estas recusaciones, se remitieron los casos a la Comisión de Ética para su evaluación y decisión. “Hay un elemento nuevo relacionado con la financiación de la campaña que nos obliga, para cuidar el debido proceso, a remitir por oficio a la Comisión de Ética“, afirmó Salamanca.
Por su parte, el ministro del Interior encargado, Gustavo García, expresó su preocupación por el uso recurrente de recusaciones como mecanismo para frenar el debate legislativo. “Preocupan siempre las recusaciones porque se están convirtiendo no en un mecanismo de control político, que es válido para el Congreso, sino porque está dirigido más a entorpecer la labor“, señaló García.
Implicaciones para la reforma a la salud
La suspensión del debate representa un obstáculo significativo para el avance de la reforma a la salud, una de las iniciativas más emblemáticas del gobierno actual. Aunque se habían aprobado 30 de los 62 artículos que componen el proyecto, aún quedan por discutir y votar temas cruciales, como la transformación de las EPS en Gestoras de Vida y Salud y las facultades extraordinarias del presidente en materia de salud.
La reforma a la salud ha sido objeto de intensos debates y controversias en el Congreso. En diciembre de 2024, la discusión fue suspendida y aplazada tras dos días de enfrentamientos verbales y acusaciones de violencia política entre los congresistas. En esa ocasión, se logró la aprobación de 23 de los 62 artículos del proyecto, pero los temas más polémicos quedaron pendientes para futuras sesiones.
La reanudación del debate sobre la reforma a la salud dependerá de la pronta resolución de las recusaciones por parte de la Comisión de Ética de la Cámara de Representantes. Una vez se emita un pronunciamiento, se espera que la plenaria retome la discusión y votación de los artículos restantes del proyecto.
