En el corregimiento de Piedra Sentada, municipio de Patía, la palabra juntanza no es solo un término, es una forma de hacer las cosas, de construir futuro desde el corazón de las comunidades.
Este espacio de agradecimiento reunió a la comunidad, al ingeniero ejecutor de la obra y a líderes locales, quienes resaltaron cómo estas alianzas permiten no solo optimizar los recursos públicos, sino también dinamizar la economía rural, generar empleo y garantizar que las inversiones lleguen donde más se necesitan.
En representación de la Alcaldía de Patía, el secretario de Infraestructura, Óscar Piamba, recibió de manos de la comunidad dos regalos cargados de simbolismo y afecto: un sombrero y un muñeco artesanal cuidadosamente elaborado por los habitantes, que representa al alcalde Jhon Jairo Fuentes. Este gesto, sencillo pero profundo, refleja la gratitud y el reconocimiento de la gente hacia una administración que ha puesto sus ojos y esfuerzos en los sectores históricamente olvidados.
“Estos convenios solidarios son una apuesta integral que va más allá de la infraestructura; buscan fortalecer el tejido social y demostrar que cuando la administración y las comunidades se unen, los resultados son reales y transformadores”, destacó Piamba durante el encuentro.
Las obras ejecutadas —mejoramiento de vías, adecuación de acueductos y mantenimiento de infraestructura— son hoy una realidad tangible gracias a la confianza mutua y al modelo de gestión participativa que caracteriza a la administración actual.
En Patía, cada convenio solidario es una muestra de que los sueños colectivos pueden construirse con manos patianas, con la dedicación de quienes aman su tierra y la visión de un gobierno comprometido con el desarrollo equitativo y la justicia territorial.
