La poesía tomó el protagonismo este jueves 1 de Mayo en la Feria Internacional del Libro de Bogotá (FILBO) con un recital inolvidable organizado por Eduardo Bechara Navratilova, director de Escarabajo Editorial

Redacción El Liberal
A las 5:00 p.m., en el Pabellón 6 de Corferias, las palabras tejieron puentes entre continentes en un evento que reunió a tres destacadas voces de la poesía contemporánea: la renombrada poeta y traductora griega Agathi Dimitrouka, el poeta cartagenero Leonel Plazas Mendieta y el payanés Diego Román Konrad.
Agathi Dimitrouka, considerada una figura central de la literatura griega actual, deslumbró al público con su presencia y lectura. Autora de una vasta y premiada obra que incluye poesía, literatura infantil y letras para canciones interpretadas por leyendas como Nana Mouskouri y María Farantouri, Dimitrouka compartió fragmentos de su libro Sí, una joya ilustrada por el artista catalán Tàssies que ha sido galardonada internacionalmente. Reconocida también por su labor como traductora, ha vertido al griego más de cincuenta obras del español, incluyendo a clásicos como Cervantes, Lorca, Neruda y autores latinoamericanos contemporáneos como Armando Romero y Jorge Boccanera. La autora presentó además su próximo proyecto editorial: una antología titulada Bolívar, eres bello como un griego, que explora los lazos entre la poesía latinoamericana y el imaginario helénico.
Junto a ella, el filósofo y poeta Leonel Plazas Mendieta ofreció una lectura profunda y reflexiva. Su obra, que ha sido traducida y publicada en Francia e Italia, se caracteriza por una lírica de pensamiento existencial y una constante búsqueda de sentido. Autor de títulos como Edad de Arena y El Olor del Polvo, Plazas es una figura clave en el panorama poético colombiano actual y un activo formador de nuevas generaciones desde su labor docente e investigadora en la Universidad del Cauca.
El cierre estuvo a cargo de Diego Román Konrad, poeta, gestor cultural y una voz emergente con resonancia internacional. Con obras como Poemas Uránicos y El Rezo que Anochece, Román Konrad ofreció un viaje poético cargado de simbolismo, sensibilidad y un claro compromiso con la cultura. Su labor como promotor de la lectura y la poesía en Popayán ha sido ampliamente reconocida, y su trabajo como director de múltiples iniciativas culturales ha dejado una huella en la formación de lectores y escritores.
Este recital fue un acto de encuentro, traducción y reconocimiento entre dos tradiciones poéticas —la griega y la colombiana— que dialogaron sin barreras. Fue también una muestra del papel esencial que juega la poesía en un mundo marcado por la incertidumbre: un lenguaje universal capaz de unir sensibilidades, sanar heridas y construir puentes más allá de las fronteras. Porque en tiempos convulsos, la poesía sigue siendo un faro: memoria, resistencia y belleza desde el Ser Interno.