Los combates se desarrollaron en las veredas La Estrella, Piedra Escrita y Playa Rica, generando alarma y pánico entre la población civil.
De acuerdo con información confirmada por la administración municipal, los enfrentamientos han dejado como saldo seis personas heridas, quienes fueron atendidas oportunamente por personal médico y trasladadas a un centro asistencial local, donde permanecen bajo observación. Las lesiones fueron ocasionadas principalmente por esquirlas y el impacto de las explosiones. También se reportaron daños en varias viviendas por la caída de artefactos explosivos cerca de zonas habitadas.
Testimonios de habitantes del sector recogidos por este medio relatan escenas de angustia y temor: ráfagas de fusil, explosiones cercanas a las viviendas y la imposibilidad de salir de sus casas por el fuego cruzado. “Vivimos momentos de terror. Nos tocó refugiarnos bajo las camas con los niños, sin saber qué iba a pasar”, narró una residente de la vereda Piedra Escrita.
Frente a esta grave situación, la Alcaldía de Suárez expresó su profunda preocupación por el uso de zonas pobladas como escenarios de confrontación, lo que representa una grave amenaza para la vida, la seguridad y el bienestar de las comunidades campesinas. En un comunicado oficial, la administración local hizo un llamado urgente al respeto del Derecho Internacional Humanitario, particularmente en lo que se refiere a la protección de la población civil y los bienes no combatientes.
“La vida y los derechos de nuestros ciudadanos deben ser salvaguardados por encima de cualquier interés armado. Reiteramos nuestro compromiso con la protección de los recursos fundamentales de las comunidades rurales y con la búsqueda de soluciones pacíficas que garanticen la tranquilidad y el bienestar de todos los habitantes del municipio”, señala el pronunciamiento del gobierno municipal.
Las autoridades locales informaron que seguirán monitoreando de cerca la evolución de la situación, en coordinación con organismos humanitarios y defensores de derechos humanos, para garantizar la atención a los afectados y la prevención de nuevas afectaciones.
Se espera que en las próximas horas las autoridades militares y del orden nacional emitan un pronunciamiento oficial sobre los combates, sus responsables y las medidas que se adoptarán para garantizar la seguridad en esta convulsionada región del departamento del Cauca. Mientras tanto, la población de estas veredas permanece en estado de alerta, a la espera de un cese definitivo de las hostilidades.
