Inicio ESPECIALES Puerto Tejada, la puerta grande del Cauca

Puerto Tejada, la puerta grande del Cauca

La población de Puerto Tejada es mayoritariamente afrodescendiente, con fuertes raíces culturales y tradiciones.

51 Puerto Tejada - Cauca, parque principal. Tour en moto por Colombia.

Por Antonio María Alarcón Reyna / fotos suministradas

Reseña histórica

El territorio municipal estaba habitado inicialmente por indígenas paeces. Sus tierras fueron adjudicadas en 1589 al Capitán Juan Alonso de Fuenlabrada, que se estableció en la hacienda de Guayabital. Posteriormente el departamento compró esas tierras en 1897, y decidió fundar una población con el nombre de Puerto Pinto en honor al general José A. Pinto, nombre que se cambió posteriormente por el de Puerto Tejada en memoria del general Manuel Tejada.

Su fundación se llevó a cabo el 17 de septiembre de 1897 en el sitio denominado Vuelta Larga a orillas del río Palo . En 1907 hizo parte de la provincia de Camilo Torres, y luego fue creado como municipio mediante ordenanza No 15 del 12 de abril de 1912.

El municipio de Puerto Tejada se encuentra ubicado en el sur occidente de Colombia, en la parte nororiental del departamento del Cauca. Dista a 108 Kilómetros de Popayán, por la carretera Panamericana que conduce hacia el norte del país. Tiene un área aproximada de 101 Kilómetros cuadrados. Su topografía en la mayor parte del territorio es plana a ligeramente ondulada, estando ubicado en el fértil valle del río Cauca, donde se desarrollan importantes actividades agrícolas, ganaderas y comerciales. El piso térmico predominante es el cálido. La superficie del municipio presenta una altura promedio de 969 msnm y una temperatura media de 23 centígrados. El tramo de la cuenca del río Cauca correspondiente al municipio de Puerto Tejada está conformada en su margen derecha por la desembocadura y la parte baja de dos subcuencas que son la del río Desbaratado y la del río Palo. A su vez estas subcuencas reciben las aguas de los ríos La Paila y Guengué. El área rural del municipio esta irrigada también por dos quebradas conocidas como las Cañas y Zanjón Oscuro, además de una serie de acequias y zanjones para el riego de los cultivos de caña de azúcar y otras actividades agrícolas, ganaderas e industriales. El agua para consumo humano es suministrada por el río Paila, que alimenta el tanque elevado ubicado en el barrio Luis A. Robles, suministrando al 92% de la población urbana.

El sector agrícola es el principal usuario de este recurso, pues el 90% de sus tierras están dedicadas al cultivo de la caña de azúcar, la gran mayoría del área sembrada se riega con agua superficial. El sistema de distribución utilizado es principalmente el de riego por gravedad, el restante en riego por aspersión. Se caracterizan en la región principalmente la etnia negra y la mestiza, las cuales desarrollan y producen artesanías en cerámica en las veredas de Perico Negro, La Pailita y Veredas Unidas.

Las comidas y platos típicos más representativos del municipio son el sancocho caucano o de gallina y elaboran una galleta negra que es ofrecida y vendida en otros municipios; de igual forma en la vereda de Perico Negro cocinan el famoso chocolate en bola, que hace las delicias de propios y visitantes. Sobre el tema ambiental, existen algunos mitos y leyendas como la del Duende, la Hojaraspaco del monte y el Calayo, las cuales han sido transmitidas a través de los tiempos en la región.

Fue en el proceso de resistencia que, durante los siglos XVIII y XIX, negros esclavos y libres se tornaron imposibles de controlar por parte de los hacendados; pero con mayor fuerza desde la promulgación de la ley de abolición de la esclavitud en 1851. Desde entonces esta población recién liberada se asentó en las haciendas a través de diversas formas de colonato para aprovechar la fertilidad de las tierras donde construyeron fincas familiares dedicadas a la producción del cacao, tabaco, café, yuca, maíz y plátano, dando lugar a una pujante economía agrícola de colonos y terragueros a finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX; otros se instalaron en los bosques, como el Monte Oscuro, y comenzaron a explotarlos agrícolamente; a lo anterior se sumó la intervención de comerciantes caleños y extranjeros, entre ambas fuerzas dieron al traste con la dominación esclavista dirigida a la distancia desde Popayán.

Su fundación acontece en un contexto nacional plagado de guerras; ha caído la República Federalista de manos de la llamada Regeneración de Núñez y Caro, de corte centralista y unitario, se ha reencauchado la iglesia católica como máxima y única autoridad educativa y religiosa con la Constitución de 1886, se ha comenzado a fraguar la venganza bogotana contra la hegemonía de Presidentes popayanejos, la cual se concretará en el quinquenio de Rafael Reyes quien desmembra al Gran Cauca en 1910; se ha pasado del siglo XIX al XX con la Guerra de los Mil Días. El sitio de Monte Oscuro va formando de esta manera un relativo pero importante mercado semanal de cacao, plátano y guadua hacia 1890; estos negros y mestizos son nietos o hijos de cimarrones y palanqueros, pero ellos mismos son ahora campesinos y colonos, cultivadores de fincas con un mercado regular y que vivieron una relativa prosperidad agrícola. Los primeros pobladores según relatos del Señor Sabas Casarán desde la época de su fundación en 1891, fueron Don Buenaventura Hernández de origen antioqueño, su hermana Catalina Hernández de Casarán quien era casada con Isidro Casarán oriundo del Municipio de Buenos Aires,

Según el historiador Mariano Sendoya, había fincas y viviendas en el lugar desde 1871 y el caserío empezó a fundarse desde 1891. Fue segregado de Caloto y erigido en municipio en 1912. Puerto Tejada es el resultado de la colonización de tierras planas y bajas bien diferente a la de laderas pues no se hace con inmigrantes sino por expansión de la propia población sobre latifundios privados y no sobre baldíos de la nación, de la resistencia al sistema esclavista arcaico, estático y fosilizado manejado desde Popayán, y de la lucha por la libertad de los hombres de ascendencia africana que, desde el siglo XVIII, sirvieron de fuerza productora de riqueza de Caloto, fundamentalmente en las minas y en las haciendas latifundistas esclavistas que ahora corresponden al norte del actual del Cauca: Japio , La Bolsa, Quintero, Pílamo, Guayabital, Güengüe, San Fernando, La Ciénaga, El Ortigal.

Puerto Tejada no fue fundada como las ciudades que aparecieron en el proceso normal de la Conquista Española orientadas por las orientaciones urbanísticas de Carlos V y Felipe II, ni tampoco como aquellas que, siguiendo unos procesos legales republicanos en la colonización cafetera de la Cordillera Central, a finales del siglo XIX y principios del XX, se fundaron durante la llamada Colonización Antioqueña de la cordillera del Quindío… Puerto Tejada se fundó para “meter en orden” a los negros de los ríos Palo, Paila y Guengüe. Fue en ese proceso de resistencia que, durante los siglos XVIII y XIX, negros esclavos y libres se tornaron imposibles de controlar por parte de los hacendados ; pero con mayor fuerza desde la promulgación de la ley de abolición de la esclavitud en 1851. Desde entonces esta población recién liberada se asentó en las haciendas a través de diversas formas de colonato para aprovechar la fertilidad de las tierras donde construyeron fincas familiares dedicadas a la producción del cacao, tabaco, café, yuca, maíz y plátano, dando lugar a una pujante economía agrícola de colonos y terragueros a finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX; otros se instalaron en los bosques, como el Monte Oscuro, y comenzaron a explotarlos agrícolamente; a lo anterior se sumó la intervención de comerciantes caleños y extranjeros, entre ambas fuerzas dieron al traste con la dominación esclavista dirigida a la distancia desde Popayán.

Se sabe que la fundación de Puerto Tejada se inició por parte de habitantes de las riberas del río Palo que escogieron la confluencia de este y del río Paila como sitio de mercado e intercambio ante la atónita mirada de los latifundistas de la época como los descendientes de Don Julio Arboleda dueños de las grandes haciendas aledañas. El sitio de Monte Oscuro va formando de esta manera un relativo pero importante mercado semanal de Cacao, Plátano y Guadua hacia 1890; estos negros y mestizos son nietos o hijos de cimarrones y palanqueros, pero ellos mismos son ahora campesinos y colonos, cultivadores de fincas con un mercado regular y que vivieron una relativa prosperidad agrícola .

Los primeros pobladores según relatos del Señor Sabas Casarán desde la época de su fundación en 1891, fueron Don Buenaventura Hernández de origen antioqueño, su hermana Catalina Hernández de Casarán quien era casada con Isidro Casarán oriundo del Municipio de Buenos Aires, abuelo de Don Sabas Casarán, Don Justiniano Hernández, la mamá de Justiniano quien era la vieja patrona, Don Juan Prudencio Mancilla que era casado con Doña Mónica Hernández, Don Juan Prudencio Cambindo, Rodolfo Lince, Don Vicente Llanos de Cali, y un ciudadano de origen italiano Juan Campelo.

El general José Antonio Pinto como Gobernador del Cauca señala la fecha del 14 de julio de 1897 como el día de la fundación de Puerto Tejada como corregimiento de Caloto, según el decreto 299. En rigor según el historiador Mariano Sendoya, había fincas y viviendas en el lugar desde 1871 y el caserío empezó a fundarse desde 1891.

Fue segregado de Caloto y erigido en municipio en 1912. Puerto Tejada es el resultado de la colonización de tierras planas y bajas bien diferente a la de laderas pues no se hace con inmigrantes sino por expansión de la propia población sobre latifundios privados y no sobre baldíos de la nación, de la resistencia al sistema esclavista arcaico, estático y fosilizado manejado desde Popayán, y de la lucha por la libertad de los hombres de ascendencia africana que, desde el siglo XVIII, sirvieron de fuerza productora de riqueza de Caloto, fundamentalmente en las minas y en las haciendas latifundistas esclavistas que ahora corresponden al norte del actual Departamento del Cauca: Japio , La Bolsa, Quintero, Pílamo, Guayabital, Güengüe, San Fernando, La Ciénaga, El Ortigal.

Con Puerto Tejada surgen 10 pueblos más los cuales aceleran la descomposición final del régimen colonial y esclavista que sobrevivía a finales del XIX, y crea las condiciones para la entrada del capital comercial caleño y de extranjeros orientado hacia la exportación de cacao, tabaco y café, y al inicio de la implantación cañera en 1940 y a su expansión paroxística en 1960-70. De acuerdo con Jacques Aprile , y teniendo en cuenta las dificultades de los linderos precisos en aquella época, tanto por el escaso desarrollo de la agrimensura o topografía como por el cambio periódico de curso de las corrientes de agua, usualmente adoptadas como linderos de las haciendas, lo más plausible es que el actual territorio de Puerto Tejada haya correspondido a la Hacienda Guayabital, de la cual fueron compradas por la Gobernación del Cauca 200 Hás en 1897, al señor Manuel José Cobo y contrata al agrimensor Paz Vargas para que haga el trazado de la población, “17 manzanas y 11 fracciones de manzanas demarcadas”, para servir de asentamiento primero al caserío y luego al casco urbano municipal. Como dice Aprile, “pueblo de negros en la tradición de las reducciones de indios del siglo XVII”.

Pero la necesidad de recuperación de las tierras y el control de la fuerza de trabajo por parte de los terratenientes, generó procesos de desalojo y despojo de los agricultores del norte del Cauca, -quizás uno de los primeros desplazamientos de población en la historia de Colombia-, para dar origen a una nueva economía de orden capitalista; en estas circunstancias es cuando se crea inicialmente el corregimiento de Puerto Tejada convertido después en Municipio (1912), y surge como resultado de las luchas que libraron los negros para obtener la libertad formal que desde 1851 se les había concedido. El lugar fue llamado “Monte Oscuro” probablemente por la espesa vegetación tropical que ocupaba todo el territorio del actual municipio, el cual se llamó así, porque la palabra Puerto invocaba al mercado del río Palo, famoso en aquella época, y con el apellido Tejada que correspondía a uno de los mayores represores de las ansias libertarias de los esclavos .

El desarrollo concomitante de Cali versus Popayán a finales del siglo XIX y principios del XX, y la apertura del Puerto de Buenaventura (1915), convirtieron a Puerto Tejada en un centro de acopio o despensa para la comarca, y para exportaciones agrícolas de la subregión, conectándose con Puerto Mallarino para abastecer el mercado de Cali, y con Puerto Isaacs para el mercado de exportación, especialmente de tabaco, cacao y café, a bordo de champanes y balsas cargadas. Hacia 1920 hay un gran auge económico por el incremento de las exportaciones cafeteras, por el desarrollo de obras públicas generado por el pago de Los Estados Unidos por la indemnización de Panamá (200 millones de dólares), que se llamó La Danza de los Millones, lo cual amplió la capacidad de generación del empleo urbano tanto en el sector manufacturero como estatal, atizando aún más la descomposición de las estructuras agrarias. De un lado los salarios urbanos considerablemente altos, especialmente en obras públicas, provocaron un movimiento reivindicativo rural que exigía remuneraciones análogas y, de otro los productores parcelarios ligados a la hacienda que vieron en la obtención de la propiedad jurídico-formal la posibilidad de destinar sus pequeñas extensiones a cultivos permanentes como café o cacao de lo cual podrían derivar ingresos superiores.

Estas reivindicaciones provocaron una segunda ola migratoria y de expulsión que desintegró la hacienda tradicional y eliminó en buena parte las unidades independientes que en su interior se habían constituido. La creación de Puerto Tejada tuvo una doble finalidad: crear un lugar de destino para los desalojados y un sitio donde pudiera disponerse de una fuerza de trabajo sometida a las condiciones de la legalidad de los terratenientes circundantes. En 1933 existían 74 agencias de compra de granos de arroz, maíz, café, cacao y tabaco; 12 tiendas de géneros y miscelánea manejada en parte por 6 sirios y 17 extranjeros; 62 tiendas de abarrotes, granos y cantinas; 6 farmacias; 2 hoteles, 5 asistencias y 2 restaurantes; 27 automotores; el Ingenio Bengala con 92 trabajadores; 10 alfarerías con 33 obreros; 2 teatros y 2 galleras; matadero público; unos 115 establecimientos comerciales y 6 fábricas de alimentos, gaseosas y dulces; y 85 funcionarios públicos nacionales, departamentales y municipales. La economía del municipio estaba conformada por areneras con extracción de gravilla de río, ladrilleras y tejares, cacaotales, platanales, guaduales, trapiches paneleros, ganado de las haciendas, y pesca de los ríos…

La actividad económica actualmente gira alrededor del monocultivo de la caña de azúcar, en mediana proporción los cultivos de pan coger, otros cultivos, la ganadería y pecuarios. Algunas haciendas desempeñan la explotación de leche, carne y doble propósito. La industria azucarera es la principal fuente de empleo del municipio. EL comercio representa un crecimiento moderado con la presencia del sector bancario, supermercados, droguerías, almacenes de ropa, calzado, y otras formas de comercio informal como la plaza de mercado y sus alrededores, en donde se concentre gran parte de comercio urbano

Límites:

Oriente: Municipio Santander de Quilichao y departamento del Valle

Occidente: Municipios de Miranda y Padilla

Norte: Departamento del Valle del Cauca

Sur: Municipios de Caloto y Villa Rica

Salir de la versión móvil