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La ganadería sostenible y la actitud de cambio del ganadero

José Alirio Cobo Lemos

Secretario Técnico CRL C – comiteregionallacteocauca@gmail.comj-cobo@hotmail.com

En la producción de leche bovina, como en cualquier otra actividad económica, lo que se busca es que el ganadero mejore su nivel de ingresos económicos. Apasionarse con la ganadería ayuda a disfrutar mientras se es productivo. Pero sin duda alguna, quien carece de conocimientos y se arriesga a hacer LO QUE NO SABE, está en riesgo constante de llegar a paso seguro al fracaso y la bancarrota. Y también le sucede tal cosa, al que, teniendo el conocimiento, hace otra cosa diferente.

La implementación de sistemas de producción sostenibles racionales NO es una moda, es hacer las cosas con sentido común en cada finca, es recibir buena asesoría técnica y permanente, para no salir corriendo a hacer lo que otros hacen, lo que está de moda, no es buscar la mejor raza, ni el mejor pasto, ni la mejor maquinaria. Las modas (actuar de acuerdo a la corriente sin importar el fundamento), casi siempre conducen al fracaso, porque muchas veces los ganaderos no reciben buena asesoría y de forma imprudente copian lo que otros hacen.

La clave está en recopilar por escrito la información precisa de los recursos con los que cuenta cada ganadero, recursos físicos (suelo, agua, infraestructura, vegetación, talento humano, etc.), recursos económicos, identificando en cada recurso su potencial de aprovechamiento para el modelo de silvopastoreo racional a establecer. Con esa información se debe escribir el proyecto o sea hacer la planificación para su implementación, comenzado por identificar un objetivo claro, medible y alcanzable en el largo plazo, con sus metas definidas a corto, mediano y largo plazo, con su plan de inversión y finalmente con un cronograma de actividades, que se convierta en la HOJA DE RUTA y así evitar caer en errores o en improvisaciones en la marcha, que al final conviertan la reconversión de la ganadería en una actividad demasiado costosa.

Este proyecto debe incluir un diseño en planos de las divisiones de potreros a establecer con el fin de garantizar que al pasto se le permitirá una recuperación absoluta, sin permitir que el ganado consuma los rebrotes. Estos mapas deben hacerse CON PRECISIÓN, no a mano alzada, no bajados de “google earth”, porque esos mapas sirven de referencia, pero son muy imprecisos en las medidas de área, y esto es fatal para la planificación. Y las divisiones deben ser muy bien calculadas y diseñadas para que esto tampoco sea causa de fracaso.

Una vez definido el proyecto en planos y teniendo la hoja de ruta, se procede a instalar las cercas, para iniciar la rotación requerida. Una vez instalada la cerca con todo su equipo, se procede a ingresar el ganado, al cual solo se le permite un día de ocupación por potrero, para que así no pueda devolverse a consumir pastos que ya pastoreó. Por tal motivo, se debe calcular la carga animal de cada rotación, según lo proyectado con base en el aforo (kilos de pasto producidos en todo el predio en el peor verano). Nunca se debe permitir que el pasto quede con un remanente de pasto demasiado alto, porque eso fomentará el acolchonamiento del potrero.

La rotación NO debe ser ordenada, porque todos los potreros tienen desarrollos muy diferentes, así que siempre el ganadero debe decidir a que potrero llevar sus animales, y para eso, debe revisar el estado de desarrollo del pasto de cada potrero, por lo cual es fundamental construir un sistema de vías para movilizar los animales sin pisotear los potreros que están en período de recuperación. Una vez definido el potrero donde el pasto ha alcanzado el punto óptimo de reposo, traslada allí los animales, previamente organiza y traslada el bebedero a ese potrero, porque si el ganado dispone de agua en cada potrero se evita tener que desplazar los animales a sitios alejados del potrero afectando su desempeño fisiológico, en especial de los ganados que en orden jerárquico son dominados y no dominantes, y así mismo sucede con el salero (el agua y la sal deben ir al ganado y no el ganado a ellas).

El ganadero NO puede olvidar que es trascendental contar con un muy buen componente arbóreo, tanto en cercas vivas, como al interior de los potreros, dado que se ha demostrado que debajo de los árboles la productividad de los pastos es mayor, contrario a lo que se pensaba. Se deben sembrar árboles de vegetación abierta, que permitan la penetración moderada de luz solar, y no debe haber más de un 30% de árboles al interior de los potreros, para que la tasa de fotosíntesis sea suficiente para optimizar el rendimiento forrajero. De esta forma, además, se logra que los árboles capten de la atmósfera gases volátiles de los excrementos de bovinos y así se evita contaminación ambiental, además que con el retorno de la biocenosis, llegan bacterias nitrificantes que controlan elementos como nitritos y nitratos, evitando su volatilización y conversión a gas nitroso, segundo contaminante atmosférico más importante después del dióxido de carbono, causantes directos del desgaste de la capa de ozono, y en consecuencia de los fenómenos de cambio climático en el mundo entero.

La GANADERIA SOSTENIBLE RACIONAL por deducción, más que una ciencia (que por supuesto lo es), es un verdadero arte para hacer ganadería en forma racional y ecológica. Cuesta muy poco, y su principal beneficio es que reduce al máximo los costos de producción ya que se anula la dependencia de insumos agroquímicos y de todas las prácticas convencionales. Es importante aclara y reconocer que la inversión inicial puede resultar costosa para el ganadero, pero, luego que retorne ese capital, en adelante el ganadero con absoluta seguridad estará muy satisfecho con la rentabilidad que empieza a generar el nuevo sistema de producción implementado.

En conclusión, no existe un sistema de producción en ganadería más eficiente y económico que la GANADERIA SOSTENIBLE RACIONAL. Sin embargo, el ganadero que es renuente al cambio, para excusarse, dice que este modelo es demasiado costoso, y que por eso no lo implementa. Pero la verdad, es que le cuesta aceptar que sea tan sencillo hacer ganadería después que las modas de la fertilización química, la mecanización de suelos, el mejoramiento genético, el boom de la transferencia de embriones, etc. lograron penetrar a su mente, y lo convencieron, y que para hacer GANADERIA SOSTENIBLE RACIONAL tenga que desaprender todo lo que ese convencionalismo le ha hecho creer durante muchos años. Obviamente, este sistema de producción nunca será aceptado por las empresas que venden productos agrícolas, ni maquinaria agrícola, ni medicamentos fuertes, ni nada de eso, porque atenta contra el futuro de su negocio, de ahí que sea tan controvertido.

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