
Con 49 votos en contra y 47 a favor, el Senado de la República archivó la propuesta de consulta popular impulsada por el presidente Gustavo Petro, cuyo objetivo era someter a votación ciudadana reformas como la laboral.
La votación en plenaria cerró la posibilidad de recurrir a un mecanismo de participación directa para avanzar en una serie de reformas sociales. El resultado constituye un nuevo obstáculo para el Gobierno, luego de que varios proyectos fueran descartados en las comisiones del Congreso.


La propuesta generó debates tanto en el plano político como legal. Críticos del proyecto argumentaron que la consulta buscaba evadir el trámite legislativo ordinario, lo que afectaría la institucionalidad. Además, señalaron que el costo del mecanismo, estimado en más de 750 mil millones de pesos, era excesivo.
Aunque el Ejecutivo consiguió respaldos importantes, incluidos cinco de los siete senadores del departamento de Córdoba, la oposición y sectores independientes mantuvieron su negativa. El fracaso de la iniciativa refleja el ambiente fragmentado del Congreso y la dificultad para alcanzar consensos en torno a las reformas.




