En razón de la gravedad de los hechos ocurridos cerca a la Carceleta Laura Valencia en Popayán, El Liberal buscó el pronunciamiento del Representante a la Cámara por el departamento del Cauca, Óscar Campo, quien pertenece al partido Cambio Radical. Su reacción no solo señala la crisis de seguridad que enfrenta la región, sino que también lanza duras críticas a la política de Paz Total del Gobierno Nacional, a la que responsabiliza del fortalecimiento de los grupos armados ilegales y del descontrol territorial.
Óscar Campo ha sido un actor en la política caucana. Antes de llegar a la Cámara de Representantes, se desempeñó como gobernador del Cauca (2016-2019), periodo en el que impulsó estrategias de seguridad y desarrollo en medio del conflicto que afecta históricamente a la región. Su conocimiento sobre la situación de orden público y su experiencia en la administración departamental lo convierten en una voz relevante en el debate actual sobre la crisis que enfrenta el Cauca.
A continuación, su declaración completa:
“Un Cauca a la deriva, la improvisación está pasando factura. Las detonaciones en Popayán se suman al hostigamiento permanente en la Vía Panamericana contra sus transeúntes, con cilindros bomba, artefactos explosivos, retenes ilegales y un mensaje generalizado de inseguridad absoluta. Pero no solo es el Cauca. Departamentos como Chocó, Norte de Santander o Arauca son el fiel testimonio de que ha hecho metástasis el pésimo manejo de la Paz Total, que, contrario a lograr la entrega de armas de los grupos al margen de la ley, los ha fortalecido militar y económicamente, otorgándoles más control territorial que antes.
Como si esto fuera poco, la reducción de efectivos en la Fuerza Pública, el retiro prematuro de altos mandos militares y de policía, la disminución de la capacidad logística en horas de vuelo y la falta de mantenimiento de la flota nos han dejado a merced del crimen.
Esperamos todos que la entrada del nuevo Ministro de Defensa, el General (r) Pedro Sánchez, muestre una clara ofensiva contra el crimen, sus finanzas y sus ocultos colaboradores. Sin embargo, este gobierno no solo ha fracasado en mostrar autoridad y control territorial; la falta de inversión social, particularmente en los municipios más golpeados por el conflicto, ha aumentado la pobreza, que contrasta con el empoderamiento de las economías ilegales.
El Cauca está tupido, más que nunca, de cultivos de coca y marihuana. Esto no es solo un problema de la Fuerza Pública, sino que evidencia la ausencia integral del Estado. La sustitución de cultivos fue un chiste en este gobierno, que terminó materializando hacer trizas el Acuerdo de Paz.”
Más allá de sus declaraciones, el Representante Campo ha hecho un llamado a la acción a través de su cuenta en la red social X, donde anunció que ha solicitado una reunión con el Gobierno Nacional para atender la crisis de seguridad en el Cauca. Su propuesta es que el presidente Gustavo Petro convoque a la Bancada Parlamentaria del departamento y al gobernador Octavio Guzmán en un Consejo de Ministros que aborde la grave situación de orden público que se vive en la región.
Para Campo, la urgencia de corregir el rumbo es evidente:
“La seguridad está absolutamente descontrolada, es terror lo que sienten miles de personas en municipios y corregimientos a lo largo y ancho del departamento“, aseguró el congresista.
Según el parlamentario, el deterioro de la seguridad no se limita al Cauca, sino que se ha extendido a otras zonas del país donde la Paz Total ha resultado en un fortalecimiento de los grupos armados ilegales. A su juicio, la estrategia gubernamental ha generado un retroceso significativo en la lucha contra el crimen organizado, debilitando a la Fuerza Pública y desmontando la política de seguridad que en el pasado contenía, al menos parcialmente, el avance de estos grupos.
Su llamado final es contundente: sin una estrategia clara, sin inversión social efectiva y sin un verdadero control territorial, el Cauca seguirá a la deriva y sumido en la violencia.
