Silvio E. Avendaño C.
El Estado es una institución establecida con un propósito político que tiene que ver con las metas colectivas de una sociedad. Está regido, el Estado, por un cuerpo administrativo que son los “servidores públicos”. El Estado supone un a priori, un tipo de acuerdo con la ciudadanía y, con el derecho a reclamar obediencia. Hay que anotar que la obediencia es algo elemental, pues no hay Estado donde no se cumplen las leyes. Además la fuerza del Estado ha de ser legítima y, su finalidad es cumplir las órdenes, en otras palabras, los mandatos tienen carácter constitucional. Hay que distinguir entre el Estado y el cuerpo administrativo, que se define como gobierno.
En América latina el Estado tiene características propias, dada la manera como se ha formado y las especificaciones de cada sociedad. En el caso del Estado colombiano hay que ver cómo surgió, a partir de la ruptura con el coloniaje español, para pasar a la órbita del mundo inglés. Es significativo el congreso que se convocó y reunió, en Cúcuta (1821). Éste aprobó la Constitución de carácter republicano. Mas el carácter republicano de la carta fundamental no coincidía con la realidad, pues si bien la república esboza la condición de estar compuesta por ciudadanos no significaba estar acorde con las circunstancias, dado que, para ser ciudadano debía cumplir dos requisitos: Saber leer-escribir y tener propiedad. Pocos llenaban los requisitos de la ciudadanía, la mayoría de la población estaba constituida por siervos y esclavos. Vale considerar que por estos lares la adopción del modelo del Estado republicano no acoge las proposiciones del republicanismo. A lo largo de la historia, la premisa de “gobierno del pueblo, por el pueblo, para el pueblo”, no pasa de ser un flatus vocis pues la tendencia histórica ha sido “el gobierno de los oligopolios, por los oligopolios y para los oligopolios.”
En tiempos recientes, en un mundo multipolar (2005) ¿a dónde se plegará la dependencia del Estado? Y. ¿qué sentido tiene la globalización, cuando la tendencia es elevar las barreras arancelarias? De otra parte, el neoliberalismo con ¿la economía de mercado seguirá en ascenso, dado el poder de los oligopolios? Y, ¿la pobreza, la miseria social seguirá en ascenso, lo mismo que la crisis climática? Y, en cuanto a la democracia ¿crecerá o desaparecerá ante el ascenso de la derecha? Y, ¿qué sentido tiene la ciudadanía, cuando la atmósfera es el aire de lo privado, dado que no hay interés por lo público, pues este cae en desprestigio, ante la avalancha de lo individual, lo particular, los oligopolios?
