El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) recibió a una persona liberada por el ELN en Cauca, actuando como intermediario neutral en una operación humanitaria.
Por: Alejandro Zúñiga Bolívar
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) informó que recibió en una zona rural del Cauca a una persona que estaba en poder de la columna Juan Carlos Chilhueso Pazú del Frente Manuel Vásquez Castaño del Ejército de Liberación Nacional (ELN). La liberación, realizada el día de ayer, se llevó a cabo bajo el estricto rol humanitario y neutral del CICR, que garantizó el respeto por la vida y la integridad de la persona.
“Valoramos que el grupo armado haya confiado en nuestra labor imparcial y nos haya entregado a esta persona para garantizar que su vida y su integridad fueran respetadas. En esta liberación desempeñamos un rol estrictamente humanitario como intermediario neutral”, declaró Nicolás Hecquet, delegado del CICR encargado de la operación.
Tras su liberación, la persona recibió alimentación y fue sometida a una evaluación para verificar su estado de salud. Posteriormente, fue trasladada en los vehículos del CICR a un lugar seguro, donde pudo reencontrarse con su familia. Según la organización, este tipo de acciones son posibles gracias al diálogo continuo y confidencial que mantienen con todos los actores armados involucrados en los conflictos.
“El diálogo bilateral y confidencial que sostenemos con todos los actores armados es fundamental para desarrollar nuestra labor humanitaria y mitigar los efectos de los conflictos armados y la violencia. Instamos a las partes de los conflictos armados a seguir permitiendo nuestro acceso a las zonas más afectadas para poder ayudar a las personas que sufren por esta realidad”, agregó Hecquet.
El CICR recordó la importancia del respeto al derecho internacional humanitario (DIH), que establece límites en los conflictos armados para proteger a quienes no participan en las hostilidades, como los civiles, y a quienes han dejado de hacerlo, como las personas privadas de libertad, los heridos y los enfermos. “El DIH es una luz que puede traer algo de alivio hasta en los momentos más álgidos de los conflictos armados“, enfatizó la organización.
El Cauca, históricamente afectado por el conflicto armado, continúa siendo escenario de acciones humanitarias como esta, que buscan aliviar el sufrimiento de las comunidades y preservar los derechos fundamentales de las personas afectadas. El CICR reafirma su compromiso de actuar como intermediario neutral y de seguir trabajando para que todas las partes en conflicto respeten los principios básicos del DIH.